12 de mayo de 2014

Jueves 8/05/2014




MENSAJE VIGESIMO SEPTIMO
(Sólo los justos verán a Dios)


Alma de Dios, estás siendo atacada por las dudas y por el infortunio de la soledad y de la falta de comprensión de quienes te rodean.

Tienes deseos de abandonar esta labor, que ya está difundiéndose del norte al sur y del este, al oeste, y en todos los países de habla hispana, como en el exterior, Europa, Rusia, Polonia, China etc.
Te aproximas a los 8.000 seguidores, y ¿quieres abandonarlos...?

Tus mensajes son dictados del Cielo, y el Cielo te ilumina para dar testimonio de sus contenidos, porque eliges videos que hacen ver y pensar, en lo escrito y dicho.

Tu cansancio es motivo del desamor y de la ingratitud, pero Jesús y María te quieren cerca, muy cerca, donde les puedas sentir y oler a santidad, para que tu furor natural salga a la luz con más fuerza y tus piernas mejorarán, como mejorará tu sonrisa aniñada, pero serena y concisa.

Ten fe en la Divina Providencia, tu sabes que el mal astuto, quiere herir tu fe firme, pero no podrá, porque el ángel San Gabriel está contigo, aunque aún no lo veas, lo sentirás, como lo sentiste en su día.
Hoy quiero que reces esta Oración con todo aquel que quiera seguir el camino de la verdad del Cristo Jesús El Nazareno.

"Sólo Dios es amor infinito, y su infinita misericordia da a quienes la solicitan con profundo énfasis."

Más vale sufrir en silencio, que equivocarse y difamar, como tantos lo hacen, por un mal entendimiento.

La envidia, hace ciego al que ve, y equivoca lo simple e ingenuo, por el mal instintivo, de todo ser inseguro de su propia fe.

Alma de Dios, tu condición es dejarte llevar por el infinita misericordia del Divino Corazón de Jesús y de María, y todo aquel que no quiera ver tu propia entrega, será apartado y desorientado, porque en verdad te digo, que un corazón cuando es noble, no tolera las dudas ni  la discordia, y se humilla ante toda sospecha de equívoco, por soberbia y por falta de capacidad de mando.

La sencillez de los corazones nobles, hablan por si sólos, pero los que como tú debéis dar testimonio de vuestro entender y ver, sois envidiados y malinterpretados, por aquellos que no quieren ver, lo que sus corazones difusos de entender sobre amar, y amar a fondo perdido, les deja llegar a lo más fácil, a discriminar y falsear su fe como responsables de todo un saber cristiano.

Por ello el tiempo será testigo de que esta gran verdad: Sólo los justos verán a Dios.

Alma de niña, hoy has cumplido con tu cometido, y debes descansar tu cuerpo, está siendo energéticamente abducido, por quien morirá en breve.

Reza por los que aún agonizan y no quieren creer que Dios es amor, y que la justicia Divina está para todos, y reza por los que no quieren creer, ya que son pasto de su propia ignorancia.




La soberbia

Reflexión la Envidia

La Humildad

Sobre la Humildad