MENSAJE CENTÉSIMO CUADRAGESIMOQUINTO
(Y, el Tiempo será testigo, de todo cuanto escrito está y anunciado, en múltiples ocasiones)
La Perseverancia en La Oración, es "La Fortaleza del Espíritu Santo"; que nos da cobijo, para ensalzarnos y ensalzar, su vigor más allá de las Estrellas; donde, El Buen Dios, nos dará, El Asilo Prometido, y La Paz Perpetua.
¡¡Amigos de la Verdadera Vida en Dios!!
Con sólo unos minutos en Oración, bastaría convencer al Mundo, de su gran error. Y, El Buen Dios, alzará vuestras manos, para pedir perdón.
La Estirpe y El Linaje, no son cosas absurdas; como no lo son, en este Mundo Terrenal, ni en el Mundo Espiritual. Por ello, "La Oración", nos hace conducir la Savia de la Vid, en nuestras venas; así como, en la de nuestros descendientes, de generación en generación.
La Estirpe y El Linaje, se hereda y se mantiene; como también, se distribuye entre otros linajes. Por ello, "La Vid del Cristo Jesús, El Cordero de Dios", está derramada por todos los Cristianos en esencia, y en aquellos, que quieran serlo.
La Sangre del TODO PODEROSO, fluye como un Torrente de Vida, para ensalzarlos y guiarlos, como "La Estirpe Elegida, por La Sabiduría del Espíritu Santo", sobre los corazones nobles.
"Amar al prójimo como a ti mismo; porque sólo el Amor une, y separa el trigo, de la cizaña."
El linaje del Cristo Jesús, El Nazareno, está heredado en las doce tribus de Israel. Y, éstas a su vez, se han multiplicado, por todo el Orbe.
¡Amad la Tierra, que os vio nacer!; porque de Ella, surgió la Vid, de vuestros antepasados. Y, volverá el Reino de Dios, para separar el mal de raíz, y quemar toda maleza.
Los Impíos, verán a Dios descender de los Cielos, como Rey de Reyes; para servirle y seguirle, hasta más allá de los Tiempos.
Y, el Tiempo será testigo, de todo cuanto escrito está y anunciado, en múltiples ocasiones.
TOMAD TIEMPO PARA ORAR
¡Es la fuerza más poderosa aquí en la Tierra!
LA ORACIÓN A JESÚS
"Señor, Jesucristo, ten misericordia de mí."
"DIOS GOBIERNA AL MUNDO PERO LA ORACIÓN GOBIERNA A DIOS"
En el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén.
Ven, Espíritu Santo,
llena los corazones de tus Fieles,
y enciende en ellos, el fuego de tu Amor.
Envía tu Espíritu, y todo será creado.
Y renovarás, la faz de la Tierra.
Oremos
Oh Dios, que iluminas e instruyes el corazón de los fieles, con la luz del Espíritu Santo, haz que en el mismo Espíritu, sepamos siempre apreciar el bien; y ser llenos de Tus consuelos Divinos. Por Cristo Nuestro Señor. Amén.
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