MENSAJE CENTÉSIMO VIGESIMOPRIMERO
(La furia del destino mal enfocado)
Toda vida significa movimiento, y toda intención de vida es, de hecho también, un movimiento del propio pensamiento.
El pensamiento profundo yace en el interior del conocimiento, y no de la mente.
La Mente yace fuera del conocimiento y de la sede del mismo. Es decir, el cerebro.
Cuando la mente se adhiere al conocimiento, no es un pensamiento propio o propiamente acaudalado en el cerebro.
La mente adquiere el conocimiento, a través de los sensores reactivos a la luz, y a la oscuridad del cosmos, como un recién nacido recibe el alimento el alimento y el conocimiento, a través del conducto umbilical al seno materno, dentro de la placenta sede, del mismo conducto vital.
El desarrollo del ingenio, siempre está interrelacionado con la ayuda del exterior, o llamado conductos auditivos y audiovisuales, que se determina para la recopilación, de información y datos, a veces con imágenes incluidas.
A través de estos conductos sensoriales, se manifiesta información de manera totalmente analógica, y extracorpórea. Es decir( fuera del sujeto pensante).
Toda acción tiene reacción.
De ahí que el matemático, filósofo, antropólogo, etc, físicos y demás, sin ser conscientes de este haber extraordinario, capaz de interrelacionarse con el mundo exterior, pone en práctica los avances científicos, filosóficos que determinan los grandes descubrimientos, como la radiofrecuencia, el teléfono móvil, tv por cable, etc.
Por esto, la furia del destino mal enfocado, conlleva a la humanidad al caos.
Perpendicularmente a la Tierra, existen imágenes audífonas, que se manifiestan en los receptores de seres más sensibles, dando a conocer a través de estas personas, acontecimientos que proporcionan información exhaustiva, sobre el desarrollo de la cáustica (de lo crítico y malintencionado), de hechos conceptuales, en la vida del planeta Tierra.
La cáustica de los hechos en la vida pasada, y en la futura de la Humanidad.
EL SENTIDO DE LA VIDA...
El Misterio de las Coincidencias
La Humildad
El silencio habla.
dones milagrosos del padre pio
MILAGRO PADRE PIO
