28 de agosto de 2019

Jueves 22/8/2019
















303. MENSAJE TRICENTÉSIMO TERCERO
(El Portal de Belén)




Aún siendo niños nos costaba creer que, en un establo, José y María se hospedaran solos, y tuvieron a Jesús en una noche de silencio y completa soledad, fuera de su tierra natal.


Pero, los hechos así fueron transcurriendo, y la gran estrella llevó a todo aquel que la seguían, a dicho pesebre con alegría, para adorarlo y manifestar que era "EL Ungido", Hijo de Dios. 


Hoy en día, la mayor parte de la Natividad del Señor no se celebra, más que en aquellos creyentes cristianos católicos que recuerdan su infancia feliz y el portal de Belén con el niño Jesús recién nacido, acompañado de José (padre adoptivo) y María (la Inmaculada concepción), junto al burro y el buey, que así se representaban.


El nacimiento de Jesús estaba anunciado 
y debidamente documentado.

San Lucas escribe sobre el nacimiento de Jesús en Belén:  
“Sucedió en aquellos días que salió un decreto del emperador Augusto, ordenando se empadronase todo el Imperio. Este primer empadronamiento se hizo siendo Cirino gobernador de Siria. Y todos iban a empadronarse cada cual a su ciudad. También José, por ser de la casa y familia de David, subió de la ciudad de Nazaret, en Galilea, a la ciudad de David, llamada Belén, en Judea, para empadronarse con María, su esposa, que estaba encinta. Y sucedió que mientras estaban allí, le llegó el tiempo del parto a ella y dio a luz a su hijo primogénito, le envolvió en pañales y le acostó en un pesebre, porque no había sitio para ellos en la posada” (Lc. 2, 4-7)

Unos pastores, que pasaban la noche al aire libre velando por turno su rebaño, de repente un ángel les dijo, no temáis, os anuncio una gran noticia que será de gran alegría para todo el pueblo, hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador, el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal, encontrareis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre. De pronto, una legión del ejército celestial, decía gloria a Dios en el cielo y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad” (Lc. 2, 8-14).
San Mateo escribe: 
“Habiendo nacido Jesús en Belén, en tiempos del rey Herodes, unos magos de Oriente llegaron a Jerusalén preguntando ¿Dónde está el rey de los judíos que acaba de nacer? porque hemos visto su estrella en Oriente, y venimos a adorarle. El rey Herodes al oír esto se turba y con él toda Jerusalén. Reúne a todos los príncipes del sacerdocio y a los escribas del pueblo preguntándoles dónde podía nacer el Mesías. Ellos le contestan en Belén de Judá, pues así está escrito. Los magos, guiados de nuevo por la estrella, caminan hasta pararse sobre el lugar donde estaba el niño. Entran en la casa, y ven al niño con María, su madre. De hinojos le adoran, y abriendo sus cofres le ofrecen los dones de oro, incienso y mira"

El símbolo de su pobreza dejaba clara constancia de la humildad de sus padres , y como Él se desarrollaría en un ambiente familiar sencillo, pero con respeto y amor, lejos de toda amenaza que pudiera poner en peligro sus vidas. 

En estos tiempos que vamos corriendo, sólo la mayor parte de los "llamados católicos" celebran las fiestas de Papá Noel y los regalos, mientras que otros niños en el mundo, sin ser católicos, mueren de hambre porque no son agraciados y no tienen quienes les proporcionen alimento, que es la base fundamental de un buen desarrollo, y sin zapatos para poder ir a la escuela.



Tomad conciencia de que la Natividad del Señor es su venida, la Buena Nueva que nos enseñó a amar a Dios y al prójimo, por ello:

Amar al prójimo en estos días tan señalados
Colaborad con aquello que pudierais dar a quienes necesitan agua, pan, alimentos básicos
 y ropa para sobre vivir, como hermanos que son nuestros.

Ayudarles a construir un gran árbol de Navidad con buenas obras, y enseñad a vuestros hijos y familiares a participar en este árbol, donde no falten unas sandalias para caminar y un buen tazón de leche al despertar.

Llenadlo de víveres y entregarlos a grupos fiables altruistas, para que estos damnificados puedan sentir una pequeña parte de la Natividad del Señor Jesús el Nazareno, sólo entonces habréis puesto en práctica las enseñanzas del verdadero católico cristiano:
"Amar a Dios y al prójimo tan necesitado".

Jesús vino al mundo para darnos a conocer sus enseñanzas 
de Paz y de Amor
 Con su ejemplo de entrega absoluta, por todos los humanos.


Así es el pesebre de Belén donde nació Jesucristo

Basílica de la Natividad en Belén

Jesús de Nazareth Película Completa En Español