Jueves 4/02/2021
379. MENSAJE TRICENTÉSIMO SEPTUAGÉSIMO NOVENO
(Dios nos llama)
Dejar entrar a Dios en nuestra vida
Cuanto más dejemos entrar a Dios en nuestra vida, más somos y nos sentimos nosotros mismos.
El mismo Dios, la fuente de toda vida, quiere habitar cada vez más profundamente en nosotros. Desde nuestro núcleo más íntimo, quiere darnos la "vida en abundancia" (Jn 10-10.) De algun modo u otro, cada hombre está llamado a revivir el drama, experimentado por San Agustin: "Tú estabas dentro de mi y yo fuera. Y fuera te andaba buscando".
A nosotros, Dios nos pide un mínimo de apertura, disponibilidad y acogida de su gracia: "Si escuchais hoy su voz, no endurezcais vuestro corazón" (Sal 94, 7-8). Es decir, para encontrar a Dios, dentro de nosotros, hace falta -misteriorsamente- "Abrirle las puertas" de nuestra casa.
En otras palabras, en este espacio íntimo del espacio, y de la quietud que hay en mi, donde nadie puede entrar si no yo, no quiero estar sólo.
Invito a Dios a entrar y estar conmigo- y a conducir mi vida-. Entonces, mi autodeterminación consiste en hacer lo que Él me diga.
No hacen falta muchas acciones exteriores que puedan incluso a agobiar, y obsesionar. Hay gente que se pasa la vida atentistima a "cumplir" con sus obligaciones y a luchar tercamente por barrer cada día sus defectos, hasta que comprende que, si se encendiera dentro de su corazón el fuego de un gran amor, todo sería más fácil: el fuego carbonizaría los defectos con gran sencillez. La cuestión no es, "¿Qué puedo hacer por Dios?", sino "¿Cómo me dejo amar por Él?".
Dios nos llama a un estilo de vida nuevo: Nos invita a vivir en su Reino, no sólo después de la muerte, si no aquí y ahora.
Para quien lo ha comprendido, la Unión con Cristo llega a ser más importante que cualquier otra cosa. Una pequeña anécdota lo ilustra de un modo gráfico:
En una ocasión, preguntaron a un párroco por uno de sus feligreses:
- "¿Quién es el Señor que acaba de salir de la Iglesia?"
Y el Párroco contestó:
- Es uno de mis ancianos que vive en comunión con Dios, y que, además hace zapatos".
La "vida" en plenitud, no se refiere a la cantidad de experiencias que acumulamos, no se trata de probarlo todo, uno puede ir a mil congresos científicos y conservar un carácter infantil. Por el contrario, otro puede no haber salido nunca de su aldea, y llegar a ser un Sabio. "No se trata de hacer más, si no de ser más"
El concepto se refiere a la cualidad de nuestras experiencias: Estar realmente presentes, dispuestos a aprender y crecer. Admirarse cuando salen los primeros crocos en primavera, o cuando se viste de color las hojas de los árboles en otoño, poner la cara al viento, saber disfrutar de una canción, de un poema y de la presencia de un amigo.
Dios a corazón abierto, documental sobre el Beato Bernardo de Hoyos
https://www.youtube.com/watch?v=1jp-HYtBwB8 Testimonios Misioneros
GLADYS AYLWARD: La "pequeña" y determinada MISIONERA en CHINA | BITE
https://www.youtube.com/watch?v=Dqx608oX3xs&t=166s
