16 de diciembre de 2014

Jueves 11/12/2014






MENSAJE QUINCUAGÉSIMO OCTAVO
(La vida en Dios emana sabiduría interior)



El Sol brillará con todo su esplendor, y tu luz será el semblante que de vida propia.
Porque en verdad te digo, que este segundo viaje a México no es casual.

El Corazón de Jesús te quiere mostrar su infinita misericordia, y enseñarte como Vassula tal como tú, no podía creer que fuera Jesús quien la hablara y le dictara en sus cuadernos su voluntad.

Este viaje te enseñará a saber más de ti.

Este viaje te dará el asidero que tanto necesitas para seguir con tu gran labor, porque esta labor, dará la vuelta al mundo.

Alma de Dios, todo tiene un porqué, y es lo que tú recibirás en estos cursillos de amor profundo a Jesús, a través de quien como tú, es un instrumento veraz.

El desierto se llenará de agua y el agua brotará sin ningún esfuerzo, porque la vida en Dios emana sabiduría interior y sentido común, como cualquier mortal.

Alabarás a tu Dios, por encima de toda criatura.

Alabarás a tu Dios, como instrumento vitalmente necesario.

Y agradeceras al TODO PODEROSO su infinita misericordia, por ser una entre tantos.

El verde bosque oxigenará tus venas, para limpiar las impurezas del pasado y encontrarás el sendero de la luz purificadora, allí donde las almas más necesitadas te llaman y reclaman tus oraciones.

Verás el rostro de Jesús serenar tus mejillas y languidecer tus dudas, como aliviará tus dolencias para cumplir con tu cometido.

María quiere darte su bendición en Guadalupe, porque fue allí donde Ella te sello como amiga, de su amor por Jesús y por toda la humanidad, la más necesitada.

Años atrás has dado tanto de ti, que ella nunca te abandona, por ello quiere que beses su manto con tu luz de amor y de esperanza, para tantos que están a tu lado, María Elena.

Bendito el que viene en nombre del Señor, porque de ellos sera el Reino de los Cielos.

Alma de niña, volverás a sonrojar tus mejillas, con el furor del amor a Jesús y a María.

Alma de niña, quiero que comiences a creer, que todo lo que has de hacer es por voluntad Divina.

Alma de Dios, tu resplandor alcanzará al unisono de un nuevo día, y Santa María, velará por tus dictados, que son los mios.

Alegra el corazón, no tengas ningún temor, pronto todo estará en calma, y tu descanso bien merecido, hará que tus ojos tristes brillen con mayor esplendor.

Alma de niña, crecerás como tu pasión por mí, será mayor y ni el huracán mas veloz podrá arrebatar tu fidelidad, y tu cantar sera más alto y mas profundo, para que nunca jamás dudes de quien eres y lo que el buen Dios, quiere que des a conocer a través de los dictados del Cielo aquí en la Tierra.


Vassula Ryden Interview USA TV 2013

Oración para salvar 1000 almas del purgatorio




Oración de Arrepentimiento y Liberación

El Señor ha dicho: "Que se arrepientan ante Mí con estas palabras"
Señor, me has soportado todos estos años con mis pecados,
pero a pesar de ello, has tenido compasión de mí.
         Me he descarriado en todos los aspectos, pero ahora no quiero pecar más.
Te he agraviado y he sido injusto. Ya no lo seré nunca más.
Renuncio al pecado, renuncio al Demonio,
renuncio a la iniquidad que ensucia mi alma.
Libera mi alma de todo lo que es contrario a Tu santidad.
Te suplico, Señor, que me salves de todo mal.
Ven ahora, Jesús. Ven ahora a habitar en mi corazón.
Perdóname, Señor, y permíteme descansar en Ti.
      Porque Tú eres mi Escudo, mi Redentor y mi Luz, y en Ti confio.
Desde hoy, Señor, te bendeciré en todo momento.
Repudio el mal y a todos los demás dioses e ídolos,
porque Tú eres el Altísimo sobre el mundo entero,
trascendiendo de lejos a todos los demás dioses.
Con Tu poderoso brazo, sálvame de la mala salud,
sálvame de estar cautivo, sálvame de los conflictos,
y derrota a mi enemigo el Demonio.
¡Ven pronto en mi ayuda, oh Salvador!
Amén.

Mensaje a Vassula el 13 de noviembre de 2006


La fe es un rayo de luz, que nos hace ver a Dios en todas las cosas, y a todas las cosas en Dios

Beata Maria Pilar Izquierdo.

Refugiémonos en nuestro Dios y Señor... en el solamente llega a descansar nuestro fatigado corazón.

Beata Maria Pilar Izquierdo.